OBESIDAD INFANTIL
La obesidad infantil es un problema preocupante que en España afecta al 28% de los niños. Los expertos calculan que el 80% de los niños y adolescentes obesos continuarán siéndolo cuando lleguen a adultos si no se adoptan las medidas oportunas.
La obesidad es un claro factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, hipertensión arterial e hipercolesterolemia. Los niños obesos tienen un riesgo considerablemente mayor de padecer estas enfermedades y de desarrollar obesidad mórbida, la forma más grave del trastorno, al llegar a la edad adulta. Además, la obesidad en niños acarrea problemas de autoestima, sobrecarga en el aparato locomotor o problemas respiratorios.
Por todo ello, los profesionales médicos advierten que hay que prevenir y tratar los problemas de peso desde la niñez para evitar que estos trastornos y las enfermedades asociadas a los mismos disminuyan la calidad de vida de la población.
En Método Amaro analizamos las causas de la obesidad infantil. Aunque esta puede estar originada por una enfermedad genética endocrina, en la gran mayoría de los casos se produce como resultado de la combinación de una serie de factores de diferente tipo:
– Factores ambientales, como una dieta inadecuada y sedentarismo.
– Factores genéticos, así, los niños cuyos padres son obesos tienen un riesgo mayor de padecer el trastorno.
– Factores psicológicos, por ejemplo, cuando se utiliza la comida para compensar problemas emocionales, estrés o aburrimiento.
Y tratamos la obesidad infantil de forma efectiva.
La detección precoz y la instauración de medidas higiénico-dietéticas adecuadas pueden corregir el problema antes de que se agrave. Los objetivos en el tratamiento de la obesidad infantil se establecen a largo plazo, ya que es conveniente que la pérdida de peso sea lenta y progresiva y lo que se persigue, además de eliminar el sobrepeso, es establecer un estilo de vida saludable, basado en una alimentación equilibrada y en la práctica de ejercicio físico.
El Método Amaro se adapta de forma eficaz al tratamiento de la obesidad infantil. A través de este método, planteamos una intervención alimentaria orientada a conseguir que el peso del niño disminuya, pero sin interferir en su crecimiento y desarrollo. Para ello, confeccionamos menús equilibrados, que incluyan todos los alimentos necesarios en las cantidades adecuadas, y establecemos unas pautas de ejercicio físico, reduciendo todo lo posible las actividades sedentarias.
Para el buen funcionamiento del tratamiento es muy importante que la familia se involucre para lograr este cambio de hábitos de vida. Para ello, ofrecemos a las familias consejos y pautas como realizar juntos las principales comidas cuando sea posible y participar en los deportes y actividades lúdicas activas junto al niño.
